El equipaje más recomendable puede variar según destino, duración del viaje y preferencias personales.

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A continuación te damos algunos consejos generales:

• Maleta o mochila: para la mayoría de los viajes, una maleta con ruedas o una mochila de viaje es una buena opción. Las maletas facilitan el desplazamiento, mientras que las mochilas ofrecen flexibilidad para explorar.

• Tamaño y capacidad: elige el equipaje que mejor se adapte a tus necesidades. Ten en cuenta la duración del viaje y los tipos de actividades que realizarás. Un equipaje de mano más pequeño puede ser suficiente para viajes cortos, mientras que los más largos pueden requerir un equipaje facturado más grande.

• Durabilidad: opta por equipajes bien construidos que puedan soportar las exigencias del viaje. Busca cremalleras y asas resistentes y materiales de calidad.

• Peso: el equipaje liviano es ideal para maximizar la capacidad y evitar cargos por exceso de equipaje.

• Equipaje de mano versus facturado: las aerolíneas tienen reglas específicas con respecto al tamaño y peso del equipaje de mano y facturado. Asegúrate de que tu equipaje cumpla con estas normas.

• Objetos personales: ten a mano una bolsa más pequeña (como un bolso de mano o una mochila) para tus artículos personales en el avión o durante las excursiones de un día.

• Cerraduras y etiquetas: los candados para equipaje y las etiquetas de identificación son útiles para mayor seguridad y facilidad de identificación.

• Consideraciones climáticas: si vas a encontrar condiciones climáticas extremas, asegúrate de que tu equipaje sea adecuado para proteger tus pertenencias.

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Prepara el equipaje siempre teniendo en cuenta los requisitos específicos de tu viaje y las restricciones específicas de cada aerolínea.